domingo. 08.09.2024

El tiempo vacacional, sobre todo cuando se está en la edad de la juventud, es algo que siempre se percibe como un espacio de ocio, de diversión. Una ocasión propicia para la procastinación, algo que también es necesaria. Sin embargo, hay gente -también en esas edades que aún no duelen al decirlas- que opta por echar una mano a quien más lo necesita. Como es el caso, por ejemplo, de Cruz Blanca.

Juan Jesús y Blanca, en la Plaza de África / Dani Hernández
Juan Jesús y Blanca, en la Plaza de África / Dani Hernández

Y es que desde hace varios años, la entidad franciscana recibe las visitas de varios jóvenes procedentes de todas las latitudes del teritorio nacional. La semana pasada eran de Bilbao. Y en esta ocasión, vienen de Granada y Sevilla. Juan Jesús y Blanca son sus portavoces. El primero nos cuenta que " somos un grupo de 15 voluntarios de Granada de vinculados a la parroquia de San Juan Pablo Segundo en el Centro de Estudios La Inmaculada. Y bueno, desde hace varios años se realiza un itinerario de educación social que bueno, con colegios concertados del centro de Granada. Estos chicos de primero de bachiller y segundo de bachillerato realizan una obra de voluntariado en centros de Granada una hora a la semana y luego se les proponen distintos campos de trabajo. Hay uno que tiene ya un recorrido extenso y bien asentado en Almería, en la provincia de Almería, en la comarca de Níjar, en la zona de Campohermoso, San Isidro, que es una zona de mucha inmigración, con invernaderos, con una realidad social de mucha pobreza. Y nosotros intentamos meternos en esa realidad, participar de ella con una experiencia austera y de fe. Y bueno, estos chicos ven que el voluntariado engancha, que para su vida pues es una propuesta atractiva entregarla el tiempo de verano y piden más. Entonces pues se les propone este año hacer una nueva experiencia en Ceuta. Y bueno, si esta experiencia como como está yendo sigue para adelante, pues el próximo año con los que han estado este año en Almería vendrán a Ceuta y así progresivamente". Blanca, por su parte, está al frente de un grupo de once jóvenes "que todos los años solemos buscar un lugar nacional para hacer un voluntariado. Venimos de un centro universitario del Opus Dei y y este año hemos elegido Ceuta por conocer la ciudad desconocida de España".

Blanca lidera un grupo de voluntarios del Opus Dei procedente de Sevilla / Dani Hernández
Blanca lidera un grupo de voluntarios del Opus Dei procedente de Sevilla / Dani Hernández

Pero ¿es cierto qué el voluntariado engancha? "Todos los viernes vamos a un barrio en Sevilla, que es el barrio de Torreblanca, en el que allí damos apoyo escolar a niños que están en zonas más vulnerables de nuestra propia ciudad. Y efectivamente, nuestra gente busca en verano, dentro de su tiempo de descanso, también sacar ese tiempo para hacer un voluntariado, para no perder esa rutina que ya tienen de dedicar tiempo a los demás. O sea que yo creo que ya llega un momento que que lo ves como parte de que complementa no solo tu tiempo sino tu propia formación, el darse eso, hacer formación.", dice Blanca.

Además, el aspecto formativo "hemos recibido charlas de distintos religiosos, de distintos profesionales del sector, explicándonos sus proyectos y también como pueden ellos profesionalmente dedicarse también a una actividad social entre los jóvenes, pues van a empezar la Universidad el año que viene. Ahora estamos con las adjudicaciones de Universidad y muchos van a ser médicos, van a ser psicólogos, terapeutas o distintas cosas, pero siempre intentando que esta experiencia les marque de tal manera que su vida profesional en su vida de fe y donde el Señor los lleve, pues puedan ser buenas personas, que tengan en cuenta la realidad compleja que muchas personas tienen y tengan un trato amable, cercano y desde el cariño con con todas las personas que se encuentren, especialmente con los más débiles"

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Juan Jesús, al frente de un grupo de estudiantes granadinos/ Dani Hernández
Juan Jesús, al frente de un grupo de estudiantes granadinos/ Dani Hernández

Y, al margen del trabajo con Cruz Blanca -principalmente realizando labores de acompañamiento a usuarios-, ¿qué más van a hacer o han hecho en Ceuta?. "Hemos visto bastante parte de la ciudad desde el barrio del Príncipe El Sardinero. Distintas realidades como Cruz Blanca Cruz Roja, la Fundación Cruz Blanca, La Adoratrices y bueno, pues en todos ellos hemos visto que hay una implicación grande con la sociedad y nos hemos encontrado pues una, una realidad que no esperábamos porque bueno, nos ha sorprendido para bien la integración que hay. Como esto es una ciudad europea, pero a la vez es África, como hay gente que con todos los rasgos árabes, con de religión musulmana pero que son españoles plenamente y que esa integración, como digo y esa convivencia sana, ya se da en Ceuta desde hace muchos años. Creo que la realidad social y migratoria va a provocar que la península esa realidad se imponga y cuanto más concienciados estemos y más conozcamos a todas las realidades sociales que podamos conocer, pues esa integración será más fácil. Y bueno, si creo que se están dando pasos. La Iglesia lleva siglos poniéndose al servicio de los más necesitados. Creo que los gobiernos de toda Europa también han asumido su parte de responsabilidad. Pero bueno, nosotros somos Iglesia y como tal tenemos una forma peculiar de acercarnos a la gente", puntualiza Juan Jesús.

El voluntariado: otra forma de 'pasar' el verano