El consejero de Presidencia y Gobernación, Alberto Gaitán, ha comparecido en la mañana de este viernes junto al jefe del Servicio de Extinción de Incendios y Salvamento, Miguel Ángel Ríos, para informar sobre los dos incendios que se declaraban la pasada madrugada en las zonas de García Aldave y el Monte Hacho. Dos fuegos que se producían en apenas una hora y media y que obligaban a actuar no solo a los doce bomberos que se encontraban de servicio, sino a otros seis que se incorporaron al mismo para combatir las llamas.
Así, ha explicado Ríos, el gasto de agua ha sido de 30.000 litros de agua por cada uno de estos incendios, ardiendo en el primero algo más de media hectárea de matorral y monte bajo, y en el segundo en torno a 3.000 metros cuadrados.
Las circunstancias en que se producían estos dos incendios hacían pensar desde primera hora de la mañana de este viernes que los mismos podían haber sido provocados. Una cuestión que está investigando en este momento el servicio de protección de la naturaleza de la Guardia Civil que será quien lo determine oficialmente. Eso sí, el jefe del SEIS es claro: “un fuego con tres focos (el de García Aldave), la experiencia nos da que pensar que ha sido provocado, porque no había viento que pudiera extenderlo, ni piñas que se trasladan cuando se calientan”. En concreto, en este primer incendio los bomberos se encontraron a su llegada con dos focos pequeños y uno más grande, mientras que en el del Monte Hacho localizaron un solo foco. En cualquier caso, no es habitual que se declaren dos incendios en dos zonas de monte de la ciudad en tan poco espacio de tiempo, “las casualidades desde mi punto de vista no existen”, ha señalado Miguel Ángel Ríos.
El consejero de Presidencia y Gobernación, por su parte, ha explicado que todos los servicios de la Ciudad se activaron para hacer frente a este incidente, desde Protección Civil a la Policía Local, activándose también servicios de la administración general del Estado, como la Guardia Civil. Precisamente, la delegada del Gobierno se acercaba hasta uno de estos incendios, el del Monte Hacho, para poder conocer su evolución en primera persona y mostrar su apoyo a los servicios implicados.
El jefe del Servicio de Bomberos, por su parte, ha recordado a los ciudadanos la existencia de un decreto que marca todas aquellas actividades prohibidas en el monte, precisamente, para evitar estos incendios forestales, como la prohibición de hacer fuego, y les ha pedido que si ven conductas que incumplen lo establecido, avisen lo antes posible a las autoridades. Y es que, ha explicado “es imposible tener todo el campo cubierto”.
