A las 18:00, la Virgen del Carmen había salido de su nueva residencia de acogida en la Iglesia de los Remedios, iniciando su solemne procesión hacia el puerto deportivo. La imagen, envuelta en fervor y devoción, había sido acompañada por cientos de fieles que la escoltaban a lo largo de la calle Real, hasta llegar al Puente de Cristo y descender hacia el puerto.
En el muelle, la esperaban el obispo de Ceuta y Cádiz, Rafael Zornoza, y el barco 'Santorum', preparado para llevar a la Reina de los Mares en su travesía por el litoral ceutí. Tras embarcar en la dársena del muelle, la procesión marítima había comenzado, navegando por las aguas que la Virgen protege con su manto celestial.
Alrededor de las 19:45, la Virgen del Carmen había llegado a la playa de la Almadraba, donde una multitud de fieles ya la esperaban en la explanada para la celebración de la Sagrada Eucaristía. La misa, presidida por el obispo Rafael Zornoza Boy y acompañado por varios sacerdotes, había sido un acto cargado de solemnidad y recogimiento. La ceremonia culminó con la bendición de las aguas del mar y un responso en memoria de todas aquellas almas que encontraron su fin en sus profundidades. En un gesto de esperanza y renovación, se presentaron también a los niños nacidos este año a la Virgen del Carmen, perpetuando una tradición que une a generaciones bajo el manto protector de la Reina del Mar.
"En cada puerto, en cada barco, en cada corazón, tu presencia, Virgen del Carmen, es nuestra luz. Que tu nombre sea siempre una oración en nuestros labios y una esperanza en nuestros corazones."
La devoción, sin embargo, no terminó en la playa. Una vez concluidos los actos litúrgicos, había comenzado la procesión terrestre que llevaría la imagen de la Virgen del Carmen por las calles y barrios de Ceuta. La ruta, marcada por cantos, oraciones y el fervor de los devotos, incluía paradas en Almadraba-Tobobán, Villa-Aurora, Barriada 12 de Diciembre, Miramar Bajo, Juan XXIII y otros lugares emblemáticos. La procesión avanzó por la Avenida Martínez Catena, el callejón de la Catedral, la calle Pepe Serón, Jaúdenes, Victori Goñalons, el Paseo del Revellín, Camoens, Plaza de Los Reyes, y la calle Real, hasta su recogida en la Parroquia de Nuestra Señora de Los Remedios sobre la 01:00 de la madrugada.
En esta jornada especial, Ceuta había demostrado una vez más su profunda devoción a la Virgen del Carmen, reforzando los lazos que unen a la comunidad bajo la protección de la Estrella de los Mares. ¡Viva la Virgen del Carmen!
