domingo. 08.09.2024

De la estadística en particular, y de los números en general, siempre se ha dicho que son fríos, sin sentimientos, pero precisamente por ello reflejan la realidad de un modo inapelable. Luego, claro, vienen las interpretaciones. Y la estadística que analizamos a continuación apunta en una dirección: los nacimientos, en Ceuta, son cada vez menos. Guste o no guste.

Y esto lo dice otra parte indisociable de la estadística, como es la comparación. 213 son los natalicios que se han producido en lo que llevamos de año, hasta mayo: último mes con la estadística -ofrecida ayer por el Instituto Nacional del asunto- completa. ¿Son muchos o pocos?

Comparemos con todo lo ocurrido desde mayo de 2020: aquel mes en el que el mundo estaba encerrado, aquellos días de teletrabajo, harina y tik tok. Al año siguiente, en 2021, habían nacido en Ceuta 264 niños en cinco meses. 300 lo hicieron entre el 1 de enero y el 31 de mayo de 2022. Y culminando el quinto mes de 2023, 270. La comparativa no miente: Ceuta presenta el número de nacimientos más bajo desde la pandemia.

Esto puede ser circunstancial, indicativo de un problema mayor o dar rienda a análisis más sesudos si lo quieren. Pero es inevitable irnos a otra estadística, que no se publicó ayer, pero que está intrínsicamente relacionada con el asunto: la evolución poblacional de la ciudad. Por seguir con los mismos años de referencia, pero con datos referentes a junio en 2021 éramos 83.164, 82.706 un año más tarde y en 2023 83.005. Es cierto que los balances de población tienden a subir en el segundo semestre de cada año -finalización de estudios universitarios, etc- en un centenar o centenar y medio de personas. Pero ahí está el dato.

Como lo está, también, el de los fallecimientos: 265 en las primeras 25 semanas del año. 54 defunciones menos de las 319 de hace doce meses. En este caso, afortunadamente.

Ceuta presenta el número de nacimientos más bajo desde la pandemia