Como a tantos jóvenes que alcanzaban la mayoría de edad, a Antonio Gueto Ramos le tocó hacer 'la mili'. Y como a muchos de esos soldados, el destino fue Ceuta. La relación entre la Ciudad Autónoma y algunos de sus soldados da para escribir ríos de tinta. No sólo por los más famosos -Pablo Motos, Carlos Segarra o Alfonso Guerra-, sino también por las historias personales que quedaron aquí. Desde los que llegaron y se asentaron en la ciudad hasta ser hioy unos más, hasta los que pasaron completamente desapercibidos o los que vuelven de vez en cuando. También aquellos que desarrollaron una suerte de fobia (cuentan que es el caso del ex vicepresidente socialista) hacia la ciudad, a base de malas experiencias, imaginarias o guardias.
Cada soldado, una historia. Pero pocas tan trágicas como las de Antonio Gueto. Un héroe, un hombre joven que perdió la vida en García Aldave. "El incendio comenzó de madrugada, y el accidente de Antonio tendría lugar sobre las 10.30 u 11.00", acierta a recordar Gabriel Fernández. El pertenecía al Ejército, aunque no conoció directamente a Gueto.
Quien si lo hizo, "era compañero mío, codo con codo" fue otro ceutí. Javier "Peque" Lladó admite que "aquel día nunca se nos va a olvidar. Éramos apenas unos niños, de apenas veinte años, y los veinte años de entonces no son los de ahora. Es algo que siempre tenemos presente", admite casi al borde de las lágrimas.En aquella época "en cada cuartel teníamos un retén para ayudar a los Bomberos en caso de incendio", recuerda Fernández. El motivo es que el cuerpo de Bomberos no tenía, entonces, la capacidad de respuesta de la que goza hoy en día. Fue al año siguiente, en 1983, cuando el actual SEIS comenzó a invertir seriamente en materiales. De hecho, actualmente el número de efectivos ronda el centenar: entonces, apenas eran treinta. Los dos responden afirmativamente cuando se les pregunta por los incendios que ha sufrido García Aldave en los útlimos años. "fue inevitable acordarnos de ese momento" en estos otros incendios. "Es algo que nos va a acompañar de por vida", insisten.
El acto, consistente en el depósito de un ramo de flores en el monumento ue le recuerda cada año, ha sido presidido por un paisano de Gueto, otro valenciano: el comandante general Marcos Llago Navarro.
