Agentes del Servicio Marítimo de la Guardia Civil han recuperado esta mañana el séptimo cadáver -segundo del mes- en lo que llevamos de verano. Y, como en las ocasiones anteriores, el cuerpo sin vida ha sido encontrado en aguas de la Bahía Sur, según confirman a Ceuta Televisión fuentes del Instituto Armado.
El hallazgo, que no por rutinario deja de ser macabro ni exponente de una cruda realidad, ha tenido lugar en el Desnarigado. Pasaban pocos minutos de las 09.00 horas cuando se dió alerta a los servicios de emergencia por parte de algún transeúnte, en una zona muy usada a primera hora de la mañana para prácticar deporte.
Según las fuentes de la Benemérita consultadas por esta casa, se trata de un varón en avanzado estado de descomposición, por lo que la deducción es lógica: llevaba varias semanas bajo el agua. Un detalle, que da idea -por si a alguien le faltan, aún, botones de muestra- de la desesperación en la que se encuentran este tipo de personas: el cadáver recuperado hoy llevaba dos manguitos, como los que usan los pequeños en la playa para aprender a nadar, por todo aparataje. Aún pendiente de que lo confirme la autopsia, todo apunta a que este séptimo muerto era menor de edad, un adolescente.
De inmediato se activó al Servicio de Vigilancia Marítimo de la Guardia Civi. y al Grupo Especial de Actividades Subacuáticas para rescatar el cuerpo y trasladarlo a dependencias del Instituto Armmado. Un capítulo más, y van siete en este verano, de la peor cara de la inmigración irregular a nuestro país, de ese contraste entre dos mundos separados por apenas unos metros.
