Ya lo aventuraba la directora general de Protección Civil, Virginia Barcones, en la primera de las dos visitas que ha realizado a Ceuta en este verano: la OPE que entonces estaba a punto de iniciarse iba a ser tranquila en cuanto a pasajeros y vehículos se refiere. Si la palabra tranquilidad fue un eufemismo para no decir, directamente, que los números no han sido positivos, ha acertado plenamente. Porque los guarismos, la venta de billetes tanto de pasajeros como de vehículos en Ceuta, es negativa. Lo dice la propia Dirección General de Protección Civil, en esos informes que emite con periodicidad. También se ha cumplido la voluntad de que la OPE influyera lo mínimo o ni se notase en el normal funcionamiento de la ciudad. Las colas de horas de hace un par de años en el embolsamiento de Loma Colmenar o las retenciones que llegaban hasta las Puertas del Campo de hace un lustro son, afortunadamente, recuerdos de otros tiempos.
Tampoco cabe hablar de un hundimiento ni de una catástrofe económica en cuanto a los números se refiere. Probablemente, habrá que hablar de un cambio de tendencia y de mentalidad por parte de las personas que vuelven a sus países de origen procedentes de Francia, Alemania o el antiguo Benelux; nuevas generaciones, que quizá prefieran la comodidad de un viaje en avión y un coche de alquiler antes que cruzarse media Europa conduciendo. Nuevas generaciones, de ciudadanos que ya no viven en apartamentos anexos a las fábricas en las que trabajaban, que cerraban en agosto para el mes de vacaciones y la limpieza y pintura y, por tanto, venían literalmente con la casa a cuestas. Y más rutas, más puertos, tanto en el sur peninsular como en Marruecos o Argelia.
Estas pueden ser las interpretaciones. El dato es el siguiente: menos rotaciones, menos pasajeros y, ligeramente, más vehículos. En concreto, y hasta el siete de septiembre, Protección Civil había contabilizado 241.602 pasajeros, lo que supone una merma de 2.259 y un 0'9% con respecto al mismo período del año anterior. Entonces, habían sido 243.861 pasajeros. Eso se nota en las rotaciones, cincuenta menos que en 2023 (pasamos de 1.298 a 1.248).
El registro en el que si se aprecia una ligera tendencia al alza es el de vehículos. Hasta la fecha, 55.729, lo que supone un incremento de 999 personas y un 1'8% en comparación con los 54.730 del pasado año. Respecto a las asistencias, el acumulado es de 2.834. De estas, 2.686 son sociales y las 148 restantes, de carácter sanitario. La Operación Paso del Estrecho está a punto de concluir con carácter oficial.
