No pudo ser, y el Club Natación Caballa se quedó con la miel en los labios el pasado fin de semana frente a la Unió Esportiva Horta. El conjunto catalán hizo valer el gol de renta qué había logrado en el partido de ida en Ceuta, y logró el billete que le confirma como equipo de superior categoría, la máxima del waterpolo masculino patrio, para la próxima temporada.
Una situación muy parecida a la de hace dos años, cuando el cuadro barcelonés superó por un gol de ventaja a los ceutíes, entonces entrenados por Sergio Aguilera. Sin embargo, aquel año el Caballa logró finalmente la plaza para un efímero paso por la flor y nata del waterpolo español. Fue posible porque la U.E. Horta renunció a jugar en la máxima categoría por cuetiones económicas, correspondiendo su plaza al club de Independencia.
La rumorología, no obsstante, apunta a una repetición de la historia. Al respecto, Sergio Aguilera pide prudencia, pero prácticamente lo da por hecho. "Ese rumor está, pero habrá que esperar esta semana o incluso la próxima" para saber si el Horta acaba renuncianado en los despachlos a lo que consiguió en el agua.
Hay diferencias entre aquel Horta y el de esta temporada. "Ellos no habían conseguido renovar a jugadores importantes, que les ayudarían en caso de ascender a la máxima cateogría, mientras esta temporada parece que si, que tienen ese bloque", apunta el director general de Deportes. Sin embargo, "Horta tiene en su filosofía la formación de jugadores para surtir después" a los clubes de la máxima categoría, en especial a los de la Ciudad Condal y la provincia de Barcelona. Durante la última temporada, un dato, salvo el Real Canoe madrileño -único equipo no catalán en ganar una liga- y el Echeyde Tenerife, todos los equipos eran de Barcelona. Y esa filosofía de formar para los demás parece llevar implícita la renuncia a competir con los conjuntos de la máxima divisón española. Toca, pues, esperar, como hace dos años
