Varios jóvenes de distintos puntos de España decidieron este año participar en un Campo de Voluntariado. En Ceuta. Y como ocurre a tantos que se acercan por primera vez a 'La Bella desconocida' -antiguo, pero eficaz lema turístico- se han quedado sorprendidos. Gratamente. Hoy, han presentado sus conclusiones en la misma Biblioteca Pública 'Adolfo Suárez' que fue, hace unas semanas, prácticamente el primer lugar que conocieron de Ceuta.
"Yo les dije a mis amigos en Toledo que me iba a Ceuta de campus. Me pusieron cara rara, en plan de ¿a Ceuta?. Si: a Ceuta. No conocía la ciudad, pero ahora me he enamorado de ella. Venir aquí ha sido, en parte, una manera de romper estereotipos", explica Sergio, uno de ellos, y que protagoniza divertidos vídeos en Tik Tok sobre las distintas camisetas que les han ido reglando en estos días.
Sara Rego, gallega, admite que no ha sido un Campo de Voluntariado muy exigente desde el punto de vista del trabajo. "Lo que más me ha llamado la atención ha sido la muestra de culturas, además de la gran cantidad de actividades naúticas o el patrimonio. Es una ciudad pequeña, si, pero da mucho de si. Yo animaría a la gente, y animaré, a que vengan, crucen el charco y conozcan Ceuta", explica.
Durante estos días en la Ciudad Autónoma, en efecto, han tenido tiempo para todo. Para el tapeo, para las actividades náuticas, para conocer el patrimonio de la ciudad, para visitar los templos de las cuatro confesiones mayoritarias en la ciudad, el Parque Marítimo del Mediterráneo o rutas senderistas. Se van, pero nunca se sabe si para volver. Ganas de hacerlo, aunque sea sin el paragüas de un Campo de Voluntariado, parece que no les faltan. Y Ceuta gana, con ellos, embajadores que hablarán de la verdadera imagen de este trocito en algún lugar del Estrecho, de esa "perla entre el pecho y la garganta del mundo" de la que hablaba el antiguo poema.
