Este mediodía se ha celebrado la décima edición del "Potaje Solidario", un evento organizado por la Hermandad de la Flagelación que ha reunido a numerosos ceutíes en la calle Teniente Pacheco. Esta tradicional cita gastronómica ha tenido, como cada año, un propósito benéfico, pero en esta ocasión su causa ha sido particularmente conmovedora: ayudar a Javier, un niño de 14 años con autismo severo, a obtener un perro de asistencia.
El padre de Javier explicó la importancia de este tipo de animal para mejorar la calidad de vida de su hijo. "Javier no tiene comunicación verbal y sufre cambios de conducta debido a sus estrictas rutinas", señaló. "El perro lo ayudaría a enfrentar situaciones que para él son muy complicadas, como salir de casa por caminos diferentes, dormir o calmarse ante estímulos como ruidos fuertes".
La familia de Javier lleva varios años buscando el apoyo de asociaciones especializadas en la preparación de perros de asistencia para niños con Trastorno del Espectro Autista (TEA), hasta que finalmente encontraron una organización que entrena a los animales específicamente para estos casos. Tras un largo proceso de evaluación, el perro asignado a Javier, llamado "Gazpacho", está en fase de entrenamiento y la familia espera que pueda estar en Ceuta para el mes de enero.
El perro tendrá un impacto crucial en la vida de Javier, ya que además de ayudarlo a conciliar el sueño, podría sacarlo de crisis que suelen durar horas. "El perro, con entrenamiento, logra en minutos lo que nosotros no podemos en horas", explicó el padre. "No es solo una mascota, es una ayuda fundamental para Javier y para nosotros como familia".
La Hermandad de la Flagelación, conocida por su labor social, ha decidido sumarse a esta causa. Durante el evento, se recaudaron fondos para contribuir al coste de la adquisición y entrenamiento de Gazpacho, que ronda los dos años de preparación. "Este tipo de actos solidarios son fundamentales, ya que no todas las familias tienen los recursos suficientes para cubrir los gastos", añadió el padre.
El Potaje Solidario de la Flagelación se ha consolidado a lo largo de los años como un evento clave para la comunidad, que aprovecha la ocasión para unirse en torno a causas sociales y benéficas. Este año, sin duda, la historia de Javier y la posibilidad de que tenga en Gazpacho una ayuda esencial, ha tocado el corazón de los asistentes, quienes disfrutaron de un delicioso potaje mientras aportaban su granito de arena.
La familia de Javier espera poder tener a Gazpacho en casa para las fiestas de Reyes, tras un proceso de acoplamiento en el que viajarán a Madrid para un curso intensivo de convivencia con el perro. "El perro será parte de nuestra vida, y esperamos que esta ayuda no solo transforme la vida de Javier, sino que también sirva para visibilizar lo importantes que son estos animales para los niños con autismo", concluyó el padre, agradeciendo el apoyo recibido en este evento tan especial.
