Cuando se haga efectivo el nombramiento de Jesús Lopera, director territorial “in pectore” del INGESA, el antecesor y sucesor de Fernando Pérez-Padilla tendrá ya un catálogo de peticiones por parte de algunas centrales sindicales. Es el caso de la Unión General de Trabajadores, que ha dado a conocer algunas de estas demandas. Antonio Ponce, perteneciente a la sección sindical de UGT, menciona, por ejemplo, la apertura de agendas, es decir, que se agilicen a los usuarios las citas con sus especialistas.
Otra de las peticiones de la central estriba en un proyecto presentado el pasado 9 de marzo por el anterior delegado del Gobierno: convertir parte del Hospital Militar en una residencia para médicos, a fin de favorecer el arraigo de los nuevos galenos en Ceuta. La idea gusta a Ponce, pese a que según el dicha propuesta ha encallado al complicarse las negociaciones entre Defensa y Sanidad.
Ponce también apuesta por la formación: cree necesaria la acreditación de nuevas unidades docentes.
Por último, no cree posible una reunión con el próximo equipo directivo de INGESA hasta mediados de septiembre. La toma de posesión de Lopera vendrá acompañada, además, de un ramillete de nombramientos y ceses en el ámbito de la sanidad pública ceutí, con un período vacacional de por medio. Cree, por tanto, que los primeros contactos tendrán lugar al final del verano, aunque considera probada la solvencia tanto de Lopera como del nuevo director general, Alfonso Jiménez Palacios.
