La Unidad de tabaquismo ofrece una ayuda eficaz a aquellos que no quieren abandonar ese propósito de año nuevo de dejar de fumar. Herramientas útiles para no solo dejar de fumar, sino para evitar recaer. Apoyo a quienes lo intentan, sabiendo que en muchas ocasiones hacen falta hasta tres veces hasta lograrlo definitivamente.
Dejar de fumar no es automático, hace falta tiempo, y sobre todo quererlo. La Unidad de Tabaquismo tiene una lista de espera, que se esfuerzan por atender, y una vez que se logra cita el tratamiento toma su tiempo, aunque muchos de los que han pasado por él han encontrado el proceso más fácil de lo que suponían en un principio, y aseguran que ha merecido la pena.
El equipo multidisciplinar de la Unidad ofrece ayuda personalizada. El tratamiento comienza con una sesión de evaluación, a partir de la que se determina las necesidades especificas de cada individuo y se decide que herramientas emplear para lograr la abstinencia del tabaco.
Para dejar de fumar se dan muchos consejos, pero las profesionales tienen claro que lo importante es intentarlo, no crearse un fantasma de negatividad y que la herramienta más poderosa para lograrlo es tener clara cuales son las motivaciones para acabar con esta perniciosa adicción.
Las consecuencias del tabaquismo son nefastas para el organismo en todos los casos y está comprobado que cada cigarro contiene 4.700 productos químicos de los cuales 43 son cancerígenos y 200 venenosos. Si quieres dejar de fumar, puedes.
