El cruce de declaraciones entre el ex secretario general del PSOE, José Antonio Carracao, y su sucesor en el cargo, Manuel Hernández, sigue creciendo. Si este último negaba durante la jornada de este martes que nadie de su dirección política hubiera llamado a Madrid para dar de baja del partido a su predecesor, este miércoles ha sido este último el que ha vuelto a insistir en ese extremo señalando que fue una llamada de Ferraz la que le alertó de este hecho.
Carracao ha remitido un comunicado a los medios de comunicación en el que explica su escrito sobre la sensación de asco que le produce Pedro Sánchez, algo que no considera un insulto, sino un sentimiento, y que se expresa en plena campaña electoral, retirándolo, afirma, en cuanto las urnas se pronuncian sobre quién es el nuevo secretario general del PSOE.
El ex secretario general del PSOE ha acusado, además, a Manuel Hernández de ser él quien convierte en noticia esa sensación al conceder una entrevista en la que señalaba que su escrito se llevaría a los órganos de decisión del partido.
José Antonio Carracao ha señalado que ha guardado silencio ante diversos hechos, como el correo electrónico supuestamente difundido por miembros del propio partido con acusaciones de índole personal, las insidias vertidas contra su persona en medios de comunicación, la negativa de Pedro Sánchez a visitar Ceuta en las pasadas elecciones autonómicas, la campaña de acoso contra quienes formaron parte de su equipo, los insultos en redes sociales contra Sandra López, cuando llamaron fascista a su padre o cuando le acusaron públicamente de comportamientos deshonestos.
Carracao ha señalado, además, que nuca pidió la baja de nadie en su partido y sí hizo porque pudieran volver quienes estuvieran fuera.
Finalmente ha señalado que hablar de unidad no es lo mismo que practicarla y que a pesar de hablar de ella, Hernández no incorporó a nadie del equipo de Pablo Nuñez, su rival en las primarias, a la Ejecutiva del partido y despidió al trabajador que públicamente mostró el apoyo a su rival.
Para Carracao, Hernández debe dejar de defenderse de los de dentro y pelear con los de fuera.
