"Una cultura encerrada en si misma es una cultura encaminada a perderse". La frase de Mohandas "Mahatma" Gandhi viene que ni pintada para describir el Holi Festival; una tradición con la que los seguidores de la religión hindú daban gracias a los dioses por los años de buena cosecha.
Del plano más estrictamente religioso al lúdico y festivo. Todo un festival de colores, de música y alegría, que ha colgado en su primera edición en Ceuta el cartel de "no hay billetes". 800 personas, de todos los credos, disfrutaron de lo lindo en un festival que ha llegado para quedarse.
El presidente de la Comunidad Hindú, Ramesh Chandiramani, explicaba que la idea de traer el Holi Festival a Ceuta partía "de los jóvenes" hindúes de Ceuta, que se preguntaban por qué Ceuta no contaba con una celebración cómo las que tienen lugar en otras del territorio nacional con implantación hindú.Y un curioso giro histórico: coincide el desembarco del Holi Festival en Ceuta con el setenta aniversario del fallecimiento de Gandhi, celebrándose a escasos metros de la estatua de uno de los mayores iconos del Siglo XX.
