Las obras de mejora del entorno de la ermita de San Antonio ya han comenzado con la demolición de las construcciones aledañas al antiguo centro de menores de La Esperanza. El objetivo de esta actuación, encomendada a TRAGSA y que tendrá un plazo de ejecución de 6 meses, es crear un conjunto armónico en los exteriores de la ermina, con una configuración más homogénea.
En la primera fase de la actuación, junto al derribo de las edificaciones antes citadas, se ha realizado el replanteo del claustro porticado, que ya estaba implícito en el siglo XVIII y que se construirá adosado al lateral de la ermita. Una vez se finalice la primera parte de la obra, se procederá a configurar un espacio único alrededor de la ermita, un entorno diáfano en el que habrá dos espacios de miradores y que estará adornado con plantas acordes al clima mediterráneo y que precisen un cuidado mínimo. Además, el recinto estará dotado de comunicaciones, alumbrado, una fuente ornamental y elementos de mobiliario urbano como pérgolas para el descanso y disfrute de los visitantes.
El presupuesto de esta obra es de 609.848 euros y el proyecto es obra del arquitecto ceutí Francisco Pérez Buades. La intervención, han explicado desde la Ciudad Autónoma, permitirá poner en valor una zona con un alto interés turístico e histórico.
Para que esta obra se pudiera realizar, el Ministerio de Defensa ha otorgado una concesión demanial de los terrenos a favor de la Ciudad por 20 años y prorrogable hasta un máximo de 75.
A pesar de que el plazo de ejecución de esta actuación es de 6 meses, está previsto que la misma no interfiera en la celebración de la tradicional Romería de San Antonio, que tendrá lugar el 13 de junio.