El mundo de las criptomonedas está en cierto modo mirando a Ceuta, y podría conllevar de materializarse que otros subsectores de las denominadas FinTech, empresas que mezclan finanzas y tecnología pudieran fijarse en las ventajas fiscales que ofrece la ciudad. Eso es lo que vino a explicar Giacomo Collini al sector del juego on line asentado ya aquí. Ha desarrollado una pasarela de pago que da garantía de seguridad no sólo en la privacidad también en la trazabilidad de las divisas y que entiende que puede ayudar al sector del juego a captar clientes que hoy en día apuestan en el mercado negro usando esa moneda para pagar sus apuestas.
Collini lo ha explicado a las claras, quiere trabajar con el sector del juego regulado para ayudarles a competir con los competidores del mercado negro atrayendo a esos clientes que hoy optan por usar “el cash del futuro”, como ha insistido Collini, para pagar sus apuestas. Les garantiza trazabilidad por si se dieran fraudes, ha tratado de borrar los estigmas de esa especie de mundo oscuro al que han colocado a las criptodivisas. Su producto hace que sea fácilmente rastreable cualquiera de estas criptomonedas y si lo requiriera la inspección saber por qué manos y en qué momento han pasado.
Jorge Hinojosa, el jefe del grupo de presión del juego on line en España, le ha dicho que sí, que su producto cumple con muchos de los requisitos y horizontes por los que entiende que tiene que transitar esta industria para seguir mejorando: mejor la experiencia del jugador, innova y puede ayudar a competir con el mercado negro del que tantas veces se quejan los operadores ante el regulador. Pero, siempre y cuando eso no vaya a generar dudas que se conviertan en problemas precisamente con el regulador, es decir tiene que seguir cumpliendo con el resto al juego responsable y a la transparencia de las transacciones para evitar futuros problemas.
De eso han hablado guiados por Cristina Mura, Hinojosa y Collini durante su intervención en las jornadas organizadas por la entidad Bet On Ceuta que agrupa a las empresas del sector en la ciudad. Collini además ha dejado una pincelada de algo que afecta nuclearmente a la fiscalidad ceutí, muchos de sus colegas en Dubai, Estados Unidos o Reino Unido perciben Ceuta como un territorio ‘off shore’, paraíso fiscal, él mismo ha reconocido que antes de conocer esta realidad lo pensaba. La realidad es que no hay trampa ni cartón ni paraíso fiscal, Ceuta está dentro de la Unión Europea y su regulación fiscal está visada y revisada por las autoridades y homologada.
Eso mismo lo han ratificado dos abogados de E&Y, Felipe Massa y Alberto García Valera. El segundo participó en las discusiones que se abrieron en la Unión Europea hace apenas un lustro para revisar cuáles de sus propios territorios podrían estar instalados en la fiscalidad paradisiaca o en sus bordes. “Y nunca, nunca, nunca se llegó ni a mencionar Ceuta”, ha apostillado.
Ni tan siquiera como posibilidad de que no lo fuera. García Valera de hecho recordó que el Régimen Económico y Fiscal de la ciudad salió reforzado con la integración de España en la Unión Europea. Y que no hay discusión de la seguridad jurídica de sus incentivos. Lo que sí hay es una discusión sobre qué cosas hace falta mejorar.
Ahí tanto Massa como él han repasado casi impuesto a impuesto las cosas que creen necesario cambiar para lograr los objetivos por los que en 1955 se creó el actual REF, lograr el pleno empleo o acercarse a él y el arraigo de la población.
Para seguir caminando en esa dirección, desde E&Y reclaman mejoras concretas por ejemplo en el ciclo mercantil completo que han de cumplir las empresas para poder beneficiarse de esa fiscalidad ventajosa en el impuesto de sociedades, el famoso artículo 33. Creen que eliminar este requisito permitiría atraer a empresas o partes de las mismas que dan servicio a una matriz más grande y hoy por hoy no encuentran incentivo alguno en trasladarse hasta la ciudad. Algo que no es que ya reclame la ciudad, lo reclama la treintena de empresas del sector de juego que entienden que partes de su grupo tendrían que estar aquí pero no acaban de desembarcar porque no encuentran ese incentivo fiscal.
Piden desvincular el ciclo económico para establecer otro requisito distinto, la creación de empleo.
Es quizás el ejemplo más relevante, el más conocido y el más demandado, pero no el único. Massa y García Valera creen que se necesitan cambios en el IPSI, en el IRPF, y en prácticamente cada impuesto. No grandes cambios, sino pequeñas modificaciones para adecuar el REF a los tiempos actuales y permitir con esos pequeños cambios que sus beneficios alcancen a más empresas y se erijan como un verdadero atractivo de forma definitiva para permitir atraer talento a la ciudad y culminar un cambio de modelo económico hacia la Ceuta azul, verde y digital, tantas veces proclamada en los últimos tiempos.
Entre otras, por ejemplo, piden dotar aún de mayor seguridad jurídica a todo el entramado incluyendo la referencia definitiva en la Ley General de Tributos. O que la nueva Ley de Startups, contemple los mismos incentivos fiscales para este sector una vez se cruce el Estrecho.
