sábado. 11.05.2024

Un grupo de turistas alemanes alojados en un paradisíaco hotel con vistas al mar en pleno invierno. Es la estampa habitual a la que están acostumbrados en La Gomera, pero la imagen de partida, la foto inicial de la pesadilla del coronavirus en España. Porque en ese grupo de turistas -afortunadamente para ellos superaron rápidamente la enfermedad- se encontraba el primer caso de coronavirus en la historia de nuestro país.

 

Aquello ocurrió el 31 de enero, cuando Europa empezaba a asumir que la COVID-19 no era solo una cuestión de China. El virus entró por La Gomera, y La Gomera será uno de los primeros lugares que recuperen la normalidad según el Gobierno central. La isla canaria -célebre por sus parajes naturales, como el Parque Natural de Garajonay o por ser lugar de avituallamiento de la primera expedición colombina- entrará directamente en la fase uno del plan de desconfinamiento el próximo lunes.

 

La Gomera no es la única isla en hacerlo. La Graciosa -algo menos de 750 habitantes- y El Hierro (casi 11.000) son las otras dos partes del archipiélago canario en avanzar de fase ante la evolución de la epidemia. La otra es Formentera, en Baleares. La insularidad, sabido es, tiene una serie de inconvenientes. Pero en ocasiones como esta, puede ser una auténtica bendición

La pesadilla que empezó y comenzará su fin en La Gomera