martes. 19.03.2024

Ceuta no es racista

 

“Ceuta, de por si es racista”. Quien así habla es una destacada representante del PSOE en Ceuta y además, lo que resulta especialmente grave, una representante electa de ese mismo pueblo al que considera racista en su totalidad.

 

 

Desde el Partido Popular, no podemos tolerar que un representante institucional de todos los ceutíes realice tal afirmación, cuando no se ajusta a la realidad y acusa injustamente de forma generalizada a toda la sociedad. Comentarios de ese tipo solamente distorsionan y crean malestar, en vez de ayudar a construir una sociedad libre y tolerante; heterodoxa y empática, donde la diversidad de culturas conviva en paz e igualdad, enriqueciendo la convivencia.

 

 

Desde nuestro partido afirmamos que Ceuta no es racista, sino una ciudad que es modelo de convivencia, y donde todos trabajamos día a día para hacer un lugar mejor. Esta afirmación, utilizada dentro del tráiler de un programa del canal Telecinco ha sorprendido a propios y extraños y a pesar de que la protagonista se ha apresurado a justificar el contenido de la frase con el socorrido “está descontextualizada” lo cierto es que ha causado hondo malestar entre el conjunto de la población ceutí. La excusa además no se sostiene porque, independientemente del contexto en el que se haya pronunciado, la frase en cuestión es tajante y no permite muchas interpretaciones. Si lo que quería decir es que en Ceuta existen personas racistas o xenófobas tendría que haberlo expresado de esa forma, pero al referirse a “Ceuta, de por sí” está dando a entender que los ceutíes llevamos en el ADN ese racismo, lo que sin duda resulta ofensivo y contradictorio con la realidad de una ciudad multicultural y tolerante como pocas existen en España y el resto de Europa.

 

 

El grave error de la diputada socialista no es solo un error atribuible a su persona, es la visión que de la Ciudad tienen los llamados partidos progresistas, unos partidos que aun no han asumido el carácter diverso de nuestra ciudad y contemplan las relaciones que existen entre sus ciudadanos sobre la base del victimismo y la confrontación. Siguen siendo los representantes de una parte determinada de la ciudadanía y no del conjunto de esta.

 

 

El daño que han causado a la imagen de la Ciudad estas declaraciones de una diputada socialista como representante político en activo y en un programa de alcance nacional son difícilmente cuantificables, pero al menos nos muestran con claridad lo que el PSOE piensa de aquellos a los que quieren gobernar.

 

 

Exigimos al PSOE una rectificación de esas manifestaciones y que no vuelva a emplear el racismo como uso partidista.

Ceuta no es racista