La Unión General de Trabajadores considera que no se puede permitir que se ponga en tela de juicio la profseionalidad de dos colectivos que define como “maltratados”, en rerferencia tanto al Área de Menores como a la Policía Local. En el primero de los grupos, el 90% del personal -unos 130 trabajadores- se encuentra en situación de interinidad, con más de 10 años a la espera de que se consoliden sus puestos de trabajo. En el Centro de la Esperanza, dice la central sindical, son cinco los trabajadores del personal educativo los que tienen que atender sus funciones con 190 menores extranjeros no acompañados. Ven, asimismo, como difícil, la implicación del personal de las bolsas de trabajo, ya que estos no van a estar en plantilla más allá de nueve meses en el tiempo, periodo al que hay que restarle el tiempo destinado a formación.
Por lo que respecta al cuerpo autonómico de seguridad, la plantilla está mermada según el sindicato en unas 30 personas, recordando el amplio catálogo de servicios -Tarajal II, playas o nueva creación- a costa de mermar las unidades de Tráfico y Seguridad Ciudadana, por lo que exigen al Gobierno de la Ciudad la dotación del personal necesario para estos servicios.
