Como cada 20 de septiembre, como manda la tradición, el acuartelamiento de García Aldave ha vuelto a abrir sus puertas para conmemorar, con una formación en su patio de armas, el 98 aniversario de la fundación de La Legión, unidad insignia del Ejercito Español, con especial vinculación a Ceuta. No en vano fue en la ciudad, precisamente en García Aldave, donde tuvo su primera base en unos años muy complicados por la dureza de los combates de la Guerra del Rift.
Un 20 de septiembre más, este jueves se ha conmemorado el momento en que el primer legionario se alistó, un gesto que se recuerda un siglo después como el del nacimiento de una unidad que se ha convertido en uno de los referentes del Ejército Español.
Nadie ha querido perderse este acto, ni las autoridades civiles de la ciudad, como el presidente o la delegada del Gobierno, ni aquellas que han llegado desde Madrid, como el subsecretario de Estado de Defensa, o de la vecina localidad de Algeciras, cuyo alcalde, reconocido admirador de La Legión, ha viajado a Ceuta con motivo de esta cita. Pero los verdaderos protagonistas de este acto han vuelto a ser los legionarios, los antiguos legionarios, que como cada año han acudido fieles a su cita, y sus familias que han podido disfrutar en García Aldave de los actos de conmemoración de este 98 aniversario.
El momento cumbre de la formación ha llegado, como cada año, con el homenaje a los caídos y la interpretación del 'Novio de la Muerte', santo y seña de los legionarios por allí donde pasen y que, una vez más, ha hecho vibrar al acuartelamiento de García Aldave.
