Rafael Rodríguez, nuevo presidente de la Autoridad Portuaria, ha mantenido en las últimas horas reuniones con miembros de la Cofradía de Pescadores de la Ciudad. Según fuentes cercanas a este organismo, la reunión ha estado marcada por la “buena sintonía” entre las partes y han encontrado en el nuevo presidente portuario “a una persona cercana y con ganas de trabajar”.
Rodríguez ha pedido algo de tiempo, dado que lleva algo más de un mes en el cargo, pero se ha comprometido a ejecutar algunas medidas a la mayor brevedad. La más urgente: el traslado a la Lonja de Pescadores del Servicio de Vigilancia Marítima de la Guardia Civil. El Instituto Armado dejará sus instalaciones en el Puerto Deportivo para ubicarse junto a las oficinas de la Cofradía de Pescadores.
Algo que es bien visto por los pescadores, que entienden que es una reforma “ajustada a la realidad” del sector en estos momentos. Apenas queda una decena de barcos faenando, en condiciones además bastante difíciles ante la competencia de Marruecos y las complicaciones legales para vender pescado de Ceuta en la Península. A eso, hay que añadirle la pesca furtiva, motivo por el que la decisión de trasladar la Guardia Civil a la Lonja es bien recibida por parte del coletivo de pescadores.
