Nueva jornada de caos y colapso en la carretera N-352. Durante gran parte de la mañana de este martes, los accesos a la frontera han permanecido colapsados. Unas retenciones que, tal y como han explicado desde la Delegación del Gobierno, vendrían motivadas por las obras que se están desarrollando en la zona: de un lado la de la propia carretera, de otro la del puente elevado de Miramar que está acometiendo la Ciudad Autónoma.
Estas retenciones no solo han afectado a los accesos a la frontera, tal y como es habitual, quienes pretendían acceder a las barriadas aledañas también se han visto afectados por el colapso en el tráfico, así como quienes pretendían llegar hasta el Hospital Universitario que, desde Juan XXIII, han sido desviados por agentes de la Policía Local hacia el Morro con el fin de que pudieran llegar hasta la infraestructura hospitalaria a través del interior de la ciudad.
En torno a las dos de la tarde, estas retenciones han comenzado a desaparecer ante la decisión tomada por las administraciones de embolsar a los vehículos que trataban de acceder a la frontera en la explanada de Juan XXIII. Una solución que ha permitido descongestionar el tráfico en la zona durante la tarde de este martes.
