jueves. 28.03.2024

Tal y como ha informado el diario El Pueblo de Ceuta, el jurado popular declaró, por unanimidad, “no culpable” a Mohamed S.H.M. de los delitos de asesinato, homicidio en grado de tentativa y tenencia ilícita de armas en relación al asesinato de Tafa Sodia, ocurrido el día 17 de julio de 2013 en el Paseo de la Marina Española. Se dictó una orden de libertad inmediata por parte del magistrado juez que presidió la vista. A primeras horas de la mañana de este viernes se trasladó al jurado lo que se denomina el objeto del veredicto, esto es, una serie de preguntas que han sido elaboradas por el presidente de la sala, en este caso el magistrado Emilio José Martín Salinas, y se les dio unas instrucciones a tener en cuenta durante la deliberación. Ya se encontraban en la fase de discutir entre ellos, examinar pruebas, analizar los datos que han ido recopilando durante los días del juicio y responder, de forma motivada, a las preguntas y finalmente llegar a un veredicto. No tenía por qué haber unanimidad, pero la hubo. 


Los integrantes del jurado estuvieron aislados y tenían como máximo tres días para emitir el veredicto, pero no consumieron ese plazo, ya que de no haberse alcanzado un veredicto, tras los tres días estipulados, el juicio se habría anulado y se hubiera tenido que fijar una nueva fecha y otro jurado, con lo cual los plazos se hubieran alargados, cuando el acusado ya llevaba 20 meses, aproximadamente, en situación de prisión provisional sin fianza. 


El juicio, con tribunal popular, comenzó a desarollarse el pasado lunes y concluyó con la última palabra del acusado este jueves en la Sección 


El asesinato de Tafa Sodia se produjo a la 1.15 horas del 17 de julio de 2013 en el Paseo de la Marina Española. Era el mes de Ramadán y Tafa Sodia llevaba aproximadamente una semana en Ceuta, después de haber cumplido cinco años de destierro en la península.


Tardaron poco en ir a por él. No se ocultaba ni iba armado. La rutina era que después de romper el ayuno, por la noche, iba a pasear con su mujer. Era el día de la Virgen del Carmen. En concreto, ese día había llegado en su coche al centro de la ciudad y lo dejaron en el aparcamiento subterráneo de la Gran Vía. A partir de ahí fueron andando por el Paseo de la Marina Española hasta la altura del Hospital de la Cruz Roja y regresaron. Al llegar a un puesto de turrones cercano a los Baños Árabes, enfrente, se produjo el ataque.


Tafa Sodia y su esposa Rachida caminaban cogidos del brazo cuando Anuar Mohamed Hamedi, alias ‘Rambo’, empieza a atacar. El primer disparo es mortal de necesidad. Un tiro por la espalda en la nuca y más disparos en la parte de la sien derecha que le atraviesan la cabeza y salen por la parte izquierda. Un segundo pistolero, que había permanecido oculto entre dos vehículos, también participó en el ataque, apareciendo de frente y disparando. Una vez que Tafa Sodia se encontraba en el suelo fue rematado sin piedad. Una ejecución.


Su esposa, en un principio, pensaba que la primera detonación era un petardo. Se giró y vio a Rambo mientras su esposo caía al suelo, herido de muerte. Ella temió por su vida. Se tiró al suelo para evitar los disparos. Sufrió una depresión tremenda con síntomas tales como amnesia disociativa. En el primer momento pudo reconocer al primero de los tiradores, Rambo, girando la cabeza ella hacia atrás.  


Semanas más tarde, con terapia psiquiátrica y psicológica, empezó a recordar, según expuso un perito. La mente, en casos de una experiencia traumática tan grave, tiende a proteger a la persona, bloqueando la mente ante el hecho ocurrido. Según explicó el perito en psicología clínica con la terapia adecuada la persona debe asumir, en principio, lo ocurrido.

 

El tribunal popular no dio credibilidad al testimonio de la viuda de Tafa Sodia sobre el crimen

 

Demoledor. El veredicto sobre el que se pronunciaba el jurado poco antes de las doce de la noche de ayer no dejaba lugar a dudas. Se consideraba que el testimonio de la viuda de Tafa Sodia en la que inculpaba a Mohamed S.H.M. de ser el segundo pistolero que participó en el asesinato de su esposo el día 17 de julio de 2013 carecía de credibilidad.


En este sentido, ha sido un verdadero varapalo para las acusaciones, tanto para el Ministerio Fiscal como para las particulares, de forma que no ha quedado acreditado que la testificación de Rachida, la viuda de Tafa Sodia, fuera veraz. Es más, carecía de toda credibilidad para el jurado, por unanimidad.


En todo caso, una vez que se conoció el veredicto del jurado, la disposición del magistrado Emilio José Martín Salinas no tenía vuelta de hoja: libertad inmediata para la persona acusada, que lleva 20 meses en prisión preventiva como consecuencia de los hechos tan graves de los que estaba siendo acusado.

El acusado de ser coautor de la muerte de Tafa Sodia, declarado “no culpable”