UGT lleva denunciando desde noviembre del pasado año que especialidades como oftalmología, dermatología, neurología, digestivo, cardiología y ecografías tienen cerradas sus agendas y no admiten más pacientes.
Una situación que trasladaron a los responsables de INGESA hace más de 6 meses, recibiendo preocupación por solucionarla, pero sin que se haya realizado ninguna acción.
Esta práctica la consideran ilegal ya que vulnera la carta de derechos al no proporcionar atención dentro de un plazo máximo determinado.
Además han señalado que los pacientes, que cifran en más de mil, que no tienen cita por esta razón no se recogen en las estadísticas de demora.
UGT ha anunciado que seguirá denunciando esta situación como media de presión a INGESA y ha advertido que los pacientes están completamente indefensos antes esta práctica, cuando les deniegan de forma indefinida la atención sanitaria que precisan y sin posibilidad de recurrir a ninguna otra instancia.
