Poco se parecerá el nuevo Díaz Flor al polideportivo que en estos días termina de derribarse en la zona de Miramar. Una infraestructura que se pondrá de nuevo en pie, desde cero, en un plazo de 13 meses desde el inicio de su construcción y para la que la ciudad invertirá 7'8 millones de euros.
Con un aspecto mucho más moderno, tal y como muestran las primeras imágenes del proyecto, y adaptado a los nuevos tiempos, el nuevo pabellón no solo supondrá una mejora estética sino que abrirá a nuevas posibilidades al deporte ceutí, especialmente al deporte de piscina.
Y es que el Díaz Flor contará con una piscina adaptada a las medidas para la celebración en el mismo de competiciones deportivas nacionales, una vieja aspiración del waterpolo ceutí que, esta vez sí, parece que se verá cumplida con esta nueva infraestructura. Junto a la piscina, la grada contará con un aforo de 250 personas.
Pero no solo eso, el nuevo polideportivo tendrá 5 salas de actividades dirigidas, una zona de vestuario para cada una de las actividades, una zona museística para trofeos, un aula didáctica y una pista polideportiva en la que podrán practicarse deportes como voleybol, balonmano, baloncesto, fútbol sala, hockey o badminton.
La superficie total construida ascenderá a 7.277 metros cuadrados y está previsto que el pabellón de servicio a unos 6.000 usuarios.
