jueves. 25.04.2024
SEMANA SANTA

La Ceuta más multicultural muestra sus mejores esencias en el Traslado del Medinaceli

Como cada año, la tradición manda y los ceutíes han acudido por miles a las inmediaciones de la iglesia de San Ildefonso, en el Príncipe Alfonso, para acompañar al Cristo de Medinaceli y la Virgen de los Dolores en el traslado hasta su Casa Hermandad. Una cita que ha arrancado a las seis y media de la tarde de este sábado y que ha completado el Traslado en apenas un par de horas.

 

 

Cuenta la historia que aquel Convento de los Trinitarios que ahora vuelve a estar de moda por la reforma de la Avenida Alcalde Sánchez Prado, acogió durante años a un cautivo muy especial. Con una pulsera roja y azul, era el Cristo de Medinaceli; los colores de aquel brazalete eran señal de que la Orden había pagado, como por otro preso, por la libertad de esa imagen vilipendiada en Mekines tras el sitio de Muley Ismail. Cuenta la leyenda -no documentada- que tras el cierre del convento trinitario, la imagen de aquel Medinaceli fue trasladada a Madrid, donde se venera en la Basílica del mismo nombre.

 

Si aquella historia tiene su origen en un enfrentamiento religioso, nada de eso queda en tardes como la de este sábado de marzo. La imagen del Cristo de Medinaceli -"el Cristo de nuestro barrio", nos repiten algunos vecinos a periodistas locales y peninsulares- , acompañada de la de María de los Dolores sale en medio de un respetuoso silencio. Baja por el Quemadero, hasta producirse la icónica imagen del "Señor de Ceuta" junto a la mezquita principal de Sidi Embarek.

 

Penitentes con cruces, ojos vendados y cadenas, "mantillas", prácticamente todas las autoridades políticas y eclesiásticas y, sobre todo, muchas personas acompañan al Cristo un año más. Miles. El cortejo solo hace dos paradas: ante la Iglesia de San José y la Capilla de La Palma, con la imagen del mismo nombre y la de la Pollinica en la puerta de una Iglesia iluminada desde la que este domingo comenzará la primera procesión de la Semana Santa 2018.

 

Cosas del progreso: la entrada en funcionamiento del nuevo centro penitenciario acaba con el momento más entrañable, como era la entrada en Los Rosales para liberar a un preso. No importa: el ceutí de 55 años que recuperará su libertad pasado mañana, lo hará en un momento y lugar muy especiales. Volvemos a la historia: el mismo lugar, junto a la estatua de González Tablas, por el que llegó hace 600 años la imagen de la Virgen de África.

 

Pero el final del traslado, como casi siempre. Con Loli Álvarez dando lo mejor de si misma para dedicar una saeta tanto al Cristo como a la Virgen, hoy a hombros y el lunes a costal, a su llegada a la Casa de Hermandad. La misma que se cierra minutos después para que los costaleros y cofrades puedan dar rienda libre a emociones contenidas. Y fuera, miles de personas que acaban de protagonizar, otra vez, una tarde especial de la Ceuta más genuina.

La Ceuta más multicultural muestra sus mejores esencias en el Traslado del Medinaceli