miércoles. 17.04.2024

¿Cómo evitar las picaduras de la Carabela portuguesa?


Para evitar las picaduras de la Carabela portuguesa, es muy importante no subestimar la situación. Desde INGESA han advertido de que la única manera de evitar las picaduras es no bañarse, ni siquiera en la orilla, ni mojarse con agua de la playa recogida en cubos, ya que puede contener fragmentos.


También es primordial evitar cualquier contacto con la medusa, no tocarla nunca, ni siquiera cuando se encuentra muerta o varada en la arena. En caso de haber tocado alguna, se debe recordar no llevar las manos a los ojos o a la boca, ya que son zonas más sensibles.


Es muy importante también, para evitar picaduras, seguir las instrucciones y advertencias de la playa y las difundidas por los medios de comunicación y, en caso de encontrar medusas en lugares donde noexita un aviso, se debe informar inmediatamente al puesto de socorro más cercano o a las autoridades locales.


Hay que tener especial cuidado con los grupos de riesgo, entre los que se encuentran niños, ancianos, personas alergicas, con problemas cardiovasculares o asmáticos y las personas que previamente hayan sufrido una picadura.


Para evitar que nos ataque esta falsa medusa, también es conveniente usar cremas de protección solar que, aunque no evitan las picaduras, pueden disminuir el riesgo, y utilizar prendas protectoras que cubran la superficie corporal.


¿Cómo actuar en caso de que nos pique?


Si pese a seguir todas estas instrucciones, hemos sido picados por una Carabela portuguesa, el INGESA recomienda actuar de la siguiente manera. No se debe nunca rascar o frotar la zona afectada, ni siquiera con una toalla o con arena, ya que esto activará los cnidocitos restantes. Tampoco se debe aplicar amoniaco, orina o vinagre.


Ante una picadura de medusa, se debe lavar la zona con suero fisiológico, o en su defecto agua de mar, asegurándonos siempre de que no contiene fragmentos de tentáculos, pero nunca con agua dulce.


Se debe acudir siempre inmediatamente a un puesto de socorro o al centro de salud más cercano pero, en caso de no poder acudir a un puesto de salvamento, se deben quitar los restos de tentáculos adheridos a la piel con pinzas o algún objeto de borde fino.


Para aliviar el dolor, se debe aplicar frío de forma intermitente, de cinco a quince minutos, sin frontar y evitando el contacto directo. Sintomáticamente, pueden utilizarse geles o pomadas específicas, antihistamínicos y analgésicos.


En el caso de que tengamos una herida, se aconse desde INGESA aplicar un antiséptico, tres veces al día, hasta que cierre la herida. Además, si la persona afectada tiene antecedentes de picaduras, se debe vigilar la posible aparición de reacciones alérgicas.

 

¿Qué hacer ante la picadura de una Carabela portuguesa?