sábado. 20.04.2024

Uno de los grandes iconos del denominado estado del bienestar y del envejicimiento activo es, sin duda, la red de viajes que el IMSERSO organiza por todo el territorio nacional para personas en situación de jubilación. Una serie de viajes que incluyen a Ceuta desde hace algunos años, lo que permite a los usuarios descubrir la Ciudad Autónoma o reencontrarse con ella. Es lo que le ha ocurrido a un grupo de turistas procedentes de Cataluña, que lamentan no haber podido pasar más tiempo en Ceuta. Minutos antes de partir hacia Tánger y Tetuán, algunos contaban sus sensaciones. Una señora, por ejemplo, se sentía reconfortada por haber conocido el cuartel de Regulares, del que tantas anécdotas de "mili" le contaba su difunto esposo.

 

 

No son pocos los casos en que una actividad profesional nos puede llevar varias veces a una ciudad sin que tengamos tiempo para conocerla más allá de lo que nuestra labor nos ha llevado a hacer. Es el caso de un comercial ya jubilado, que ha visitado Ceuta en varias ocasiones -la última hace cuatro años- pero que reconoce que la estaba conociendo justo ahora.

 

 

Pero sin duda, el testimonio más llamativo es el de una hija de la antigua Calle de la Estrella. Perteneciente a aquella generación de niños que dejó su pueblo para buscar prosperidad en la emergente Cataluña de mediados del pasado siglo, ha vuelto cincuenta y siete años después a la ciudad que la vio nacer.

 

 

La "queja" más generalizada: el poco tiempo del que han dispuesto. Buena señal, nos decían: no es bueno ver todo de los sitios que nos gustan. Siempre es necesario tener algo pendiente para poder regresar.

De Cataluña a Ceuta: una oportunidad para conocer o redescubrir la Ciudad a través del...