La frase “Aquí o en Pekin” suele ser representativa de una verdad axiomática; es algo que no es rebatible ni en Ceuta ni en la capital China. Una ciudad que ha salido a relucir en la segunda de las jornadas del Pleno de Agosto. Nuria Miaja, diputada del PSOE, acusa al Gobierno de ser el responsable de incidentes como el ocurrido en Republica Argentina, cuando dos chicos recibieron una descarga eléctrica al tocar una farola. Ramos emplea la célebre frase para defender su postura e invita, irónicamente, a Nuria Miaja a viajar a la sede olímpica de 2008. Para concluir que, también ahí, la parlamentaria socialista acabaría culpando al Gobierno del empleo de canes en la cocina más tradicional del gigante amarillo.
Javier Varga, diputado de Ciudadanos, apela al Gobierno a intensificar la sanción y la lucha contra los vertederos ilegales. Subraya que no se trata de un papel o una colilla que alguien tira al suelo, sino que en determinados puntos de la ciudad basta con sentarse a esperar. Fernando Ramos, de nuevo, indica que la gente tiene un problema claro de concienciación y que es imposible tener a todos los agentes policiales en vertederos. Por cierto: Varga reparte fotografías a todos los grupos parlamentarios. El de Caballas -rechazado abruptamente por Juan Luis Aróstegui- acaba en la bancada de la prensa. Las relaciones entre Caballas y Ciudadanos, inexistentes.
Por otro lado, Carreira admite que hay un error en los cobros a la Federación de Futbol de Ceuta. El estamento que preside -aun- García Gaona solicitará a la Asamblea la declaración de interés público, lo que podría permitirle desgravar practicamente el 100% de la obra de la Ciudad del Fútbol. Sin embargo, el expediente de declaración no ha sido tramitado aún, por lo que tanto el consejero como su interpelante, Fátima Hamed, acaban admitiendo el error cometido con la esperanza de subsanarlo
