La playa de la Almadraba ha vuelto a ser, a primera hora de la tarde de este miércoles, de un nuevo "desembarco" de inmigrantes. El método es el mismo de siempre: los "pasajeros" son transportados en una lancha rápida y son arrojados a escasos metros de la orilla, mientras las motos se dan la vuelta hacia costas marroquíes. En la tarde de este miércoles, según testigos presenciales, todo ocurrió a media tarde sin que hubiera que lamentar desgracias personales
Son un auténtico quebradero de cabeza, dicen fuentes del Ministerio de Interior, por varios motivos. Primero, por la gran velocidad que llegan a alcanzar, en muchos casos superior y siempre con más capacidad de maniobra que las lanchas de la Guardia Civil o la policía marroquí. Además, tienen otras particularidades. La primera es que no tienen matrícula; la segunda es que suelen partir desde urbanizaciones cercanas a Ceuta, en las que, en medio de un constante reguero de turistas, no es difícil alquilar una moto de agua. En cualquier caso, no se trata de una tendencia nueva, sino de algo habitual en el último lustro.
Claro que no es sólo el Norte de Marruecos. En las próximas horas, el Ministerio de Interior tiene previsto confirmar, oficialmente, que hay al menos cinco detenidos en nuestra ciudad acusados de emplear el mismo método para llevar migrantes hacia las costas del sur peninsular. La base, el Puerto Deportivo.
Por otra parte, a pesar de que en los últimos días no se ha producido ningún asalto, la vigilancia en el lado marroquí de la frontera sigue siendo intensa, en previsión de que un grupo de unos trescientos subsaharianos vuelva a tratar de saltar la valla o entrar a la carrera en próximas horas.
