Eran 23 los aspirantes a acceder a la Policía Local que continuaban en la carrera a principios de esta semana, una cifra que se ha reducido drásticamente tras las pruebas físicas que tenían lugar durante las jornadas de este martes y este miércoles y tras las que han quedado 9 aspirantes, mismo número que las plazas en liza.
Las pruebas físicas eran un punto clave en este proceso, el hecho de tener que resultar apto en todas y cada una de ellas complicaba la situación para los opositores y ha impedido que 14 de ellos sigan adelante. Tres caían en la prueba de piscina, otros tres en los 1.500 metros, uno en el circuito de anillas y siete en el lanzamiento de balón. Catorce eliminados en total que tendrán que esperar a la próxima convocatoria para volver a probar suerte.
A los nueve aspirantes que continúan adelante les queda tan solo una prueba, el examen escrito y su posterior lectura ante el tribunal. Las previsiones indican que el tribunal se reúna la próxima semana para citar a estos nueve opositores para que hagan frente al último escollo que determinará cuantos de ellos se convierten finalmente en agentes de la Policía Local.