El proyecto se realiza con dos objetivos principales: por un lado, adecuar las escaleras de acuerdo a las normativas actuales en materia de accesibilidad y, por el otro, subsanar las deficiencias que actualmente presentan, como su aspecto deteriorado o la escasa iluminación.
Para cumplir con esos dos propósitos, se demolerán los peldaños y la solería existente para sustituir estos elementos por escalones de hormigón prefabricados que posibilitarán contar con unos peldaños de 15 centímetros de tabica y 32 centímetros de huella. Los rellanos tendrán todos la misma longitud: 2,80 metros, posibilitando así que las nuevas escaleras posean unas medidas cómodas y homogéneas en todo su recorrido que, en sus primeros tres tramos, contará con otras tantas jardineras escalonadas que permitirán mejorar la imagen del entorno.
De igual modo, se colocarán a ambos lados de las escaleras unos pasamanos metálicos tabulares de 4 centímetros de diámetro y a doble altura, 90 y 70 centímetros del suelo y separados otros 5 de los parámetros laterales. Estos irán fijados directamente sobre los muros laterales.
Asimismo, el muro lateral izquierdo se recrecerá con hormigón en masa para evitar que las tierras del monte caigan sobre las jardineras y sobre los tramos superiores de las escaleras. También se ampliará el muro derecho hasta una altura de 90 centímetros sobre el suelo de la escalera. Los dos muros se recubrirán con un mortero monocapa al que se aplicará un tratamiento antigrafiti.
Por último, los trabajos incluirán la sustitución de las farolas actuales por otras tipo LED sobre el muro del borde izquierdo de la escalera, de manera que la iluminación alumbre el centro del recorrido de los viandantes.
